atrapa a tu pareja

-ATRAPA A TU PAREJAJillian Greene siempre es atrapada en el acto -¡es su trabajo! Trabajando en Atrapa a Tu Pareja, a Jillian le pagaban
recelosas esposas para sonreír, coquetear y probar que no se puede confiar en el sexo opuesto. ¿Su única regla básica?
Nada de sexo. Hasta que un magnífico-electrizante hombre entra en…
Marcus Brody acaba de ser contratado como señuelo para probar la fidelidadfemenina. Lo último que Jillian necesita
es un socio… especialmente un exasperante, irresistible hombre que la hace fantasear con arrancarle la ropa.
¿Puede una inteligente mujer moderna encontrar la felicidad con el hombre más tentador que alguna vez haya
conocido? ¿Existe tal cosa como un hombre totalmente monógamo?
CAPÍTULO 1
¿Crees en el amor a primera vista o debería mirar una segunda vez?
Enla vida sólo hay algo seguro y Jillian Greene, lamentaba decir, que era que todos los hombres eran unos cerdos.
—¿Me repites la pregunta? —Dijo a su colega y amiga, Selene Garnett—. Creo que he escuchado mal.
—No. No escuchaste mal. Te pregunté lo que le dirías a un hombre que te pidiera que te quitaras las bragas para poder
olerlas.
Jillian miró a Selene, una diosa rubia en cuero negro, con unaapariencia tan etérea que hacía que los hombres
quisieran tocarla. Y seguir tocándola… Una y otra vez.
—¿Es una pregunta capciosa?
—Ojala.
Selene estaba recostada en la entrada del cubículo de la oficina de Jillian, los delgados brazos apoyados sobre la pared
azul. Las manos cubrían los dos carteles que había pegado hacía poco. Uno decía: Donde hay un Hombre, hay una
Mentira. En el otro se leía:Detrás de Cada Buen Hombre hay un Arma.
—Un tipo me lo dijo anoche —añadió Selene—. Me quedé tan impresionada, que me congelé.
—¿Te gusta ese hombre?
—Por favor. —Selene hizo rodar los ojos—. Era un objetivo.
—En ese caso, le diría que la única forma en que le permitiría oler mis bragas es si estuvieran rociadas con el virus del
Ébola.
—Ya sabía yo que tendrías la respuesta perfecta. —Selenesonrió con esa sonrisa fría tan típica de ella y prácticamente
flotó pasillo abajo en una nube de violetas y jazmín, lanzando sobre el hombro—: Danielle, me debes diez dólares.
Oh, sí. Los hombres eran unos cerdos.
Unos eran cochinillos, todo gruñir pero sin morder. Otros eran cerdos-en-formación, que oscilaban en el límite entre el
hombre y el marrano. Otros eran Miss Marranos, aquí no es necesarianinguna explicación. Y otros eran unos cerdos
hambrientos, devorándolo todo a su paso.
Estos, era a los que más odiaba Jillian.
Pero no importaba a qué lado del Cerditómetro cayeran esos tipos, Jillian no permitía que sus cualidades bestiales la
trastornaran. Ya que los hombres eran cerdos, era justo decir que ella era el matarife. Jillian felizmente cortaba las
diferentes clases de tocino y losservía a sus dueños en bandeja de plata.
Este era su trabajo y su mayor placer.
Ella (y Selene) trabajaban para Atrapa A Tu Pareja. Qué deliciosamente romántico suena, ¿verdad? Excepto que
Atrapa A Tu Pareja era el lugar dónde las mujeres venían a probar la honradez de sus parejas. Aquí era donde todo se
derrumbaba:
Jane Doe entra en la oficina de AATP, cita tres incidentes que le hacen creer que suhombre la ha engañado, luego
hojea un libro de fotos y escoge la cara y las curvas que más atraigan al gilipollas de su marido, novio o amante
demasiado cortito como para sacarse el anillo. La mujer escoge a la denominada “señuelo” y luego le da una lista de
los lugares y gustos del hombre para «por casualidad» encontrarle, usando todo su encanto. Desde luego, el señuelo
lleva una cámara oculta y unmicrófono, registrando todas sus transgresiones.
Jillian era ese señuelo.
A ella le pagaban por sonreír y mentir. Coquetear. A estos hombres ya comprometidos no había que animarles
demasiado, demostrando cuan asquerosos eran realmente.
Algunas personas (las que eran culpables) podrían considerar que les engañaba. Otras (las que eran muy culpables)
podrían considerar que lo que hacía estaba…