En el sentido estricto del concepto banda sonora (o soundtrack) podría hablar hoy sobre todos los sonidos que se incluyen en una película… diálogos, música, efectos, incidentales, etc. Pero gracias anuestra capacidad de abstracción podré limitarme a hablar simplemente de la música (instrumental o vocal) que acompaña un filme. Es maravilloso como complementamos nuestra vida con la música y consonidos… parecería que nos volvemos locos en un silencio absoluto… al menos algunos de nosotros sí hemos llegado a sentir cierto nivel de angustia con la ausencia total de sonidos. Sólo ponte a pensarun momento… las películas tuvieron música antes que diálogos, incluso, si era necesario, llevaban un piano a la sala de proyección para hacer más ameno el rato para los asistentes —imagina ver unapelícula muda sin que se oiga absolutamente ningún otro ruido… qué fastidio—.
Poco a poco la tecnología fue avanzando y la música se pudo incorporar a la película, literalmente; quien haya tenidooportunidad de ver la cinta de una película lista para proyectar habrá notado la existencia de un par de rayitas coloridas al margen de los cuadros… esas líneas corresponden a la banda sonora del filme.En fin, basta de tecnicismos y pasemos a lo que nos interesa… los soundracks de las películas. ¿Para qué poner música a una película? ¿Qué no es suficiente con las actuaciones y los diálogos? Trata dever Tiburón (Jaws, 1975) sin música y luego platicamos… La música, acompaña, enfatiza, establece, vincula emocionalmente al espectador. A lo largo de la historia del cine se han develado las carrerasde varios compositores de soundtracks como John Williams, Ennio Morricone, James Horner, John Powell, Hans Zimmer, Bernard Herrmann, Vangelis, Yann Tiersen, Mychael Danna, sólo por mencionar algunos.Esto hablando exclusivamente de composiciones instrumentales creadas para una película en particular.
En lo que respecta a los soundtracks “armados” para las películas, también existen muy…