Hace unos meses, el senado respondió a las plegarias de los homosexuales legalizando la unión matrimonial entre dos personas del mismo sexo. A esta ley se le agrego una clausula que permite laadopción de niños en parejas de esta misma naturaleza homosexual. Mientras que esta ley ha sido la cúspide de la felicidad para muchas parejas «gay» que de hace tiempo ansiaban consolidar su amor, la leytambién implica enormes cambios sociales y culturales que podrían afectar enormemente el desarrollo mental y social de los niños que se vean arrastrados a este tipo de situaciones.
Mi nombre esAlejandro Gómez, y hoy les voy a hablar sobre la adopción de niños entre parejas del mismo sexo. Antes que nada, es importante diferenciar la situación del matrimonio homosexual de la adopción de niños entales parejas; la unión matrimonial de dos personas es un acto que requiere únicamente del consentimiento mutuo de la pareja que decide casarse. Sin embargo, cuando la adopción entra en juego, maspersonas se ven implicadas en esta unión familiar; y más importante que nada, se trata de personas que no necesariamente están consientes de el tipo de familia a la que están entrando, y lo que estopodría significar para sus futuras vidas.
Docenas de estudios que analizan las vidas de hijos de parejas homosexuales han demostrado patrones alarmantes que se deberían tomar seriamente en cuenta antes deaprobar la adopción en parejas homosexuales. Mientras que estos estudios unánimemente muestran que los hijos de parejas homosexuales son más abiertos y más tolerantes a diferencias raciales, sociales,y culturales, también ilustran niveles elevados de estrés en estos muchachos, y que por consecuencia tienen una mayor inclinacion a desarrollar tendencias suicidas. Esto sucede ya que muchas veceslos muchachos sienten ansias, humillación, y pena, y hacen todo lo posible por ocultar la homosexualidad de sus padres. Esta constante lucha contra la realidad les produce niveles de estrés aun más…