El aprendizaje y el desarrollo de las competencias

El aprendizaje y el desarrollo de las competencias

Xavier Vargas Beal ,23 Mayo 2005

Problematización 1

Análisis teórico y reflexiones 7

Reflexiones finales 24

Introducción

Últimamente nos hemos visto inmersos en un arduo proceso de elaboración conceptual a propósito de planear nuestro trabajo docente orientándolo a que los estudiantesdesarrollen competencias. Encontramos la noción de competencia frecuentemente articulada a otros dos constructos educativos fundamentales: las situaciones de aprendizaje y el aprendizaje significativo.

Al mismo tiempo, no pocos de maestros expresan y muestran dificultades para comprender y manejar esas nociones. De ahí nuestro interés por profundizar en el tema y compartir los hallazgos confiando enque serán útiles a todos aquellos actores educativos que se ven cotidianamente exigidos por estos procesos de diseño e instrumentación curricular.

En El aprendizaje y el desarrollo de las competencias, Vargas problematiza el tema a partir de la nueva exigencia educativa: desarrollar competencias y hacerlo a partir de aprendizajes significativos y situados en la realidad. Interroguemos con él acada una de esas nociones poniendo sobre la mesa de análisis algunos supuestos que aceptamos como incuestionables: competencias, aprendizaje, Aprendizaje significativo y aprendizaje situado.

Problematización

Como ya lo expresamos, problematizaremos el tema a partir de la nueva exigencia educativa: desarrollar competencias y hacerlo a partir de aprendizajes significativos y situados en larealidad.

Sobre las competencias

Lo primero que la noción de competencia nos ofrece es una asociación de ideas con la empresa y el trabajo, así como con la relación directa que guardan estas nociones con el mercado. Ronald Barnett, al tratar de establecer un marco conceptual para comprender los límites de las competencias, hace una pregunta que es central para entender este cambio en laeducación superior: “¿Son los logros que busca el mundo del trabajo (al que debe responder la educación superior) semejantes a los logros generales que la educación desde siempre ha proclamado que persegue?”.[1] Reconoce sin titubeos que “una ideología, la de la competencia académica, está siendo desplazada por otra: la de la competencia operativa”.[2] Significa que “el interés de la sociedad se inclinahacia formas de conocimiento que tienen un valor de uso en el mercado del trabajo”.[3] Barnett identifica pues estas dos tendencias, la académica y la operacional, y afirma que ambas “reflejan mundos e intereses limitados (el mundo académico y el mundo del trabajo)”.[4]

En este marco neoliberal de los países del primer mundo categóricamente se afirma: «Parte de la razón por la que en laactualidad la competencia se considera un asunto de tan inmensa importancia potencial quizá sea la suposición existente en gran parte de la literatura de que se está viviendo una época de grandes e intensos cambios tecnológicos que están reconfigurando radicalmente los mundos socioeconómicos en los que operan las competencias y que los ciudadanos del siglo XXI deben adaptarse a esta nueva realidad».[5]Y sin embargo, aun a pesar de esta realidad insoslayable y del peso específico que tal circunstancia está teniendo en el diseño de los nuevos planes de estudio, conviene reflexionar respecto de la diferencia fundamental que existe entre este tipo de competitividad operativa propia del mundo de las empresas, y la competencia cognitiva en el ámbito propio del mundo académico al buscar, éste último,establecer una mejor articulación entre los objetos de estudio (conocimiento teórico) y los objetos socio-profesionales (praxis del conocimiento).

En toda competencia empresarial, deportiva, etc., ciertamente se compite y para ello se debe ser competente, pero hay una diferencia fundamental entre ser competente y ser competidor. Ser competente refiere a unas capacidades que aun siendo…