Caminando sobre raices

Caminando sobre
Raíces
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Otro día más de calma, el montículo de tierra se comía al Sol y una corriente de agua ahogaba mis entumidos pies. Mi vida no tienesentido ahora, soy completamente infeliz, y soy un árbol. Mi historia era tan similar a la de los otros árboles, pero un día dio un cambio radical que sería largo de contar para mi y difícil de creerpara ustedes.
Recuerdo que ese día empezaba el atardecer que me fascinaba ver. Estaba tan distraído que no me dí cuenta que se acercaba a mi un hombre mayor, con apariencia extraña. Esperé un rato,observándolo detenidamente, hasta que me sorprendió algo que sucedió:
-¡Hola Alberto!- dijo el hombre
En ese momento no supe que decir, sentía un cosquilleo correr por mis ramas y me temblaban lasraíces. ¿Estaría soñando? ¿Era a mí a quien se dirigía aquel hombre?
Lleno de dudas murmuré:
-¿A mi? ¿Cómo es que me entiendes? Le pregunte.
-Muy fácil, se que tú eres un árbol muy especial pues yo tesembré.
-Disculpe pero no acostumbro hablar con extraños, bueno en realidad no es mi costumbre hablar con nadie. Además no soy Alberto, no tengo nombre.
– Mi nombre es Franco, soy el mago de estepueblo, tengo una hija llamada Brisa y en este momento soy completamente inservible. Mi trabajo acabo, los niños ya no tienen fe en la magia. Sé que estas confundido porque ningún árbol a tualrededor tiene la capacidad de hablar, y eso es porque yo te sembré con polvos mágicos. Se que es difícil creerle a un completo extraño pero mi mejor muestra de que la magia existe eres tú. No te preocupes,han pasado varios años y calculo que el hechizo esta por terminar, a menos de que tu desearas quedarte convertido en un árbol. Se me olvidaba algo, si eres Alberto.

Mientras iba escuchándolo mesentía cada vez peor. ¿Me tengo que olvidar de la posible semilla y de esas cosas? Mi identidad para mi era un libro que apenas estaba desempolvando. Mientras pensaba en todo lo que pasaba en ese…