Bruner

1 Adela Cortina – España Universidad de Valencia Etica discursiva y Educación en valores 1. El ámbito de la ética aplicada El ámbito en que se planteará esta reflexión es el de la ética, es decir, el de la filosofía moral, en el doble nivel que la constituye: el nivel de la fundamentación de los principios morales y el de la aplicación a la vida cotidiana de los principios hallados. Ambas partesde la ética son sin duda inseparables y ésta es la razón por la que no prescindiremos de ninguna de ellas, pero conviene advertir desde el comienzo que nuestro trabajo se referirá muy especialmente a lo que con mayor o menor fortuna ha dado en llamarse «ética aplicada» y que hoy está ciertamente de moda . La ética aplicada se ocupa de reflexionar sobre la presencia de principios y orientacionesmorales en los distintos ámbitos de la vida social y constituye de algún modo la aplicación de una moral cívica a cada uno de esos ámbitos; de ahí que existan desde una ética política hasta una de la información, pasando por una ética de la economía y la empresa, una ética de la educación y una ecológica, pero también la bioética o la GenÉtica. Todas ellas arrojan hoy una abundante bibliografía ytienen, entre otras cosas, de novedoso el hecho de ser inevitablemente interdisciplinares. En efecto, la «interdisciplinariedad», ese término que todos nombran en el campo educativo y nadie practica, es esencial en las distintas esferas de la ética aplicada, porque pasaron los tiempos «platónicos», en los que parecía que el ético descubría unos principios y después los aplicaba sin matizaciones urbiet orbe. Más bien hoy nos enseña la realidad a ser muy modestos y a buscar junto con los especialistas de cada campo qué principios se perfilan en él y cómo deben aplicarse en los distintos contextos. La interdisciplinaridad no es, entonces, una moda, sino una necesidad. Por otra parte, no deja de ser interesante, tras haber expuesto una teoría ética, practicar la ética-ficción, como hace A.MacIntyre, e imaginar qué mundo resultaría de su puesta en vigor.
1 1

Para el estatuto de la ética aplicada y su modulación en los distintos ámbitos sociales,

incluído el educativo, ver: A. Cortina, Ética aplicada y democracia radical, Madrid, Tecnos, 1993; A. Cortina y D. García-Marzá (eds.), Razón pública y éticas aplicadas, Madrid, Tecnos, 2003.

1 Esta sería, a mi juicio, la «prueba del9» de una teoría moral. Es, pues, en este terreno de la ética, y muy especialmente de la ética aplicada a la educación, en el que se sitúa esta ponencia. 2. La forja de una ética cívica La ética es filosofía moral, es decir, aquella parte de la filosofía que reflexiona sobre el hecho innegable de que exista una dimensión en los hombres llamada «moral» . De igual modo que la filosofía de laciencia, de la religión o del arte se ocupan de estos objetos que los filósofos no han creado, tiene la ética por objeto el fenómeno de la moralidad, e intenta desentrañar en qué consiste y si hay razones para que exista: le preocupan, pues, su conceptualización y fundamentación. En este sentido, la ética es quehacer de expertos, de filósofos en este caso, que utilizan para llevarlo a cabo métodosfilosóficos (empírico racional, trascendental, fenomenológico, hermenéutica) y no pueden adjudicarle apellidos no filosóficos, como «civil» o «religiosa». Tales apellidos convienen, por el contrario, a la moral, que forma parte de la vida cotidiana, de eso que se ha dado en llamar el «mundo de la vida», de suerte que cabe decir con Apel que, en lo que respecta a los contenidos morales, ostenta laprimacía el mundo de la vida, mientras que en el ámbito de la fundamentación racional, es la ética quien ostenta la primacía . Si acudimos a la vida cotidiana, encontraremos distintas morales que van configurando el vivir de los hombres. Algunas son religiosas, es decir, apelan expresamente a Dios para dar sentido a sus propuestas, y podemos decir que han sido y son numerosas; otras, por el contrario,…